La operación de un sistema de alimentador eléctrico para pollos es más fácil y se controla de manera más precisa gracias al suministro de electricidad. Puede conectarse a un temporizador o una unidad de control que el granjero puede usar para programar cantidades específicas de alimento y intervalos de tiempo. Debido a que no requieren supervisión humana constante, los alimentadores eléctricos son más eficientes que las versiones no eléctricas. Además, estos alimentadores son capaces de contener mayores cantidades de alimento, lo que los hace ideales para granjas avícolas extensivas. Además, los componentes eléctricos pueden diseñarse para ahorrar energía, por lo que el costo de operar la unidad o la granja se reduce.